Es difícil calcular el número de soldados heridos o muertos durante los dos años de guerra en Ucrania. Conocedores del poderoso impacto de las cifras sobre bajas en la moral del enemigo, tanto Ucrania como Rusia las manipulan, ocultan y exageran.
Considerando ese detalle no menor, según medios rusos, el Ministro de Defensa de Moscú, Serguéi Shoigú el martes (23/4) dejó una estimación alarmante y desfavorable para Ucrania en una reunión de la cúpula militar.
Los datos sobre las pérdidas de Kiev son imposibles de verificar, al igual que los proporcionados por Kiev sobre los soldados rusos muertos o heridos; ambos bandos concentran sus esfuerzos propagandísticos. Objetivamente se estiman más muertos del lado ucraniano ante la superioridad militar de Moscú.
En diciembre de 2023, Sergei Shoigu informó 125.000 bajas ucranianas durante la malograda contraofensiva de 6 meses.
Por el contrario, Volodymyr Zelensky cifró en 31.000 los soldados muertos ucranianos en febrero de 2024. En las estimaciones de Ucrania, probablemente se ignore con intención la muerte de 1.500 efectivos en el polígono de Selidovo tras un potente ataque de misiles “Iskander” rusos en febrero.
Sin embargo, las estimaciones, basadas en la inteligencia estadounidense, sugieren pérdidas mayores. El ‘New York Times’ reveló en agosto de 2023 que 70.000 soldados ucranianos habían muerto y entre 100.000 y 120.000 habían resultado heridos, según estimaciones de funcionarios estadounidenses.
De todos modos, Rusia afirmó que «aumentará la intensidad» de sus bombardeos también «contra los depósitos de armas de Occidente», tras la publicación en el Congreso estadounidense de un nuevo paquete de ayuda de 61.000 millones de dólares.
Más allá de la ayuda armamentista y financiera que Occidente pueda llegar a enviar a Ucrania, el problema más dramático para los ucranianos es la escasez de soldados en el campo de batalla mientras las fuerzas rusas continúan su lento avance en la región de Donbass en una dirección oeste. El 18% del territorio ucraniano está actualmente ocupado por Rusia.
La situación es tal que Ucrania agotada está desesperada por reponer sus tropas devoradas por Rusia y recurre a soldados sin extremidades para que regresar en el ejército.
La grave escasez de tropas sucede a la destitución de Valeri Zaluzhni como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, quien antes de dejar el cargo dijo que el Ejército necesitaba casi 500.000 nuevos soldados.
Además, el presidente Volodymyr Zelensky firmó un proyecto de ley para reducir la edad de reclutamiento de 27 a 25 años.
Muertes en Rusia
En diciembre de 2023, un informe desclasificado de los servicios de inteligencia estadounidenses, en sintonía con otro de Ucrania, cifraba en 315.000 las muertes de soldados en el bando ruso.
Pero una investigación de la BBC reciente las estimó en más de 50.000, cifra ocho veces mayor que el único dato público oficial de cifras de víctimas mortales reconocido por Rusia en septiembre de 2022.
El Kremlin sólo reconoce cerca de 6.000 muertes de sus tropas en el campo de batalla. La información data del 21 de septiembre de 2022. Desde entonces, no ha vuelto a ofrecer datos.
Por su parte, el 24 de mayo de 2023, poco antes de amotinarse, el jefe del Grupo, Wagner Yevgueni Prigozhin, admitió haber perdido 20.00 hombres en la batalla por la ciudad de Bajmut.
Reino Unido las cifró en 70.000 al sumar los 50.000 soldados rusos y 20.000 mercenarios de Wagner. Con todo, en escenarios internacionales críticos, en tierras lejanas en disputa, en marco de incertidumbre, se libra una batalla informativa que tal vez nunca revele cifras consistentes.