«Boicotear las elecciones»: Viuda de Alexei Navalny desafía a Putin

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Este miércoles (6/3) Yulia Navalyana, la viuda del máximo opositor del mandatario, Alexéi Navalny, convocó una protesta masiva contra Vladimir Putin el día de las elecciones que se desarrollarán entre el 15 y el 17 de marzo.

Difícil es imaginar su derrota al considerar el enorme poder e influencia que ha cosechado durante sus 5 mandatos y ante la falta de candidatos rivales competitivos. La voz más enérgica y popular de la oposición rusa ha muerto en una remota colonia penitenciaria sobre el Círculo Polar Ártico.

Su condena de 19 años, según el Kremlin, respondió a su liderazgo una «red extremista» cuyo objetivo era «cambiar los cimientos del sistema constitucional en la Federación de Rusia».

La última esperanza de los sectores anti oficialistas era Boris Nadezhdin, pacifista y antibelicista cuya candidatura fue prohibida por las autoridades electorales tras declarar “9.000 firmas inválidas”.

Viuda de Alexei Navalny

En ese sentido, Yulia Navalnaya ya presiente la victoria de Putin y su continuidad por 6 años más en el Gran Palacio del Kremlin. Por ello, a poco más una semana de la apertura de los comicios, llamó a ”boicotear las elecciones”.

«Debemos aprovechar el día de las elecciones para demostrar que existimos y que somos muchos los que nos oponemos. Es necesario acudir al colegio electoral el mismo día y a la misma hora, al mediodía del 17 de marzo”.

“Tenemos que ir al colegio electoral un día a la vez: el 17 de marzo a las 12:00. ¿Qué hacer a continuación? Puedes elegir. Puedes votar por cualquier candidato excepto Putin. Puedes anular tu voto. Puedes escribir ‘Navalny’ en letras grandes”, añadió.

De esa forma, convocó a una protesta masiva contra el mandatario ruso al mediodía, día de las elecciones. Su idea es que la gente acuda en masa y abrume los colegios electorales el 17 de marzo formando grandes multitudes.

«Esta es una acción muy simple y segura, no se puede prohibir y ayudará a millones de personas a ver personas con ideas afines y darse cuenta de que no estamos solos. Estamos rodeados de gente que también está en contra de la guerra, la corrupción y la anarquía».

Habrá que ver si los seguidores de Navalny se atreven a responder al llamado de su viuda. Así, Navalnaya cumple con su palabra de continuar con el trabajo de su difunto esposo y asume su papel. El día posterior a su muerte sentenció:

“Vladimir Putin mató a mi marido, y al matar a Aleksei, mató a la mitad de mí, a la mitad de mi corazón, a la mitad de mi alma. Pero todavía tengo la otra mitad y eso me dice que no tengo derecho a rendirme. Continuaré el trabajo de Aleksei Navalny, seguiré luchando por nuestro país. Quiero vivir en una Rusia libre, quiero construir una Rusia libre».

Cualquier líder que critica al Kremlin desde fuera de Rusia es considerado por Moscú como un títere extranjero controlado por occidente. Su discurso, por más duro, fuerte y conmovedor, no cambiaría muchas los asuntos internos. Para ello, debería volver a su país natal pero se arriesga a ser arrestado y silenciado.