Después de dos meses difíciles para los comerciantes, llega marzo con la esperanza de que los tucumanos vuelvan a consumir. En FM Latucumana 95.9, la presidenta de la cámara de comercio de San Miguel de Tucumán, Gabriela Coronel, discutió la situación del sector.
Coronel informó que el comercio experimentó una caída de venta del 28% en enero, que aumentó al 31% en febrero. Según ella, los comerciantes están trabajando a pérdida. “Diciembre era un mes muy fuerte para nosotros y fue un mes de caída de ventas de hace muchísimos años”, afirmó.
“Todos los sectores están muy afectados. Se empezó a reactivar lo que sería librería, pero con está situación inflacionaria se vio un 6% más de movimiento en diciembre porque algunos artículos más costosos lo pudieron comprar en diciembre, que antes no pasaba esa situación”, contó.
Y afirmó: “Somos el termómetro de la sociedad, cuando la sociedad no tiene el poder adquisitivo, el termómetro lo primero que golpea es al comercio”.
Respecto a las políticas económicas dijo: “Hay una situación que entendemos todos que es de poder por lo menos mejorar y sanear la economía macroeconómica del país. Pero también hay otra realidad, hay locales ya cerrados, estamos hablando de 4 de cada 10 comercios cierran sus puertas en el microcentro por los altos costos, los sueldos, las cargas impositivas, los alquiles, pagar la energía eléctrica que antes te representaba un 7% de tu ganancia, hoy está representando entre un 15 y un 20% de tu ganancia pagar la luz. Son muchas variables, estamos pensando qué podemos hacer para seguir manteniendo está estructura y esperar a que está ola, esta crisis económica que hoy se agudiza un poco más, que empecemos a ver la luz al final del túnel porque hay muchas familias que dependemos del comercio”.
Uno de los pedidos de los empleados del comercio es abrir en horario corrido ante el aumento del boleto del colectivo. Coronel expresó su opinión al respecto: «Imagínese que no nos estén dando las ventas en los horarios de mayores ventas; imagínese que tenemos que soportar y aguantar meses sin ventas, donde serían nulas». No se podrían pagar directamente los salarios de los empleados y no estamos observando la realidad ni las consecuencias de lo que podría suceder.
Y dijo: «Un 35% de los empleados usa transporte público, lo que más nos preocupa no es solo el empleado sino también nuestros consumidores, que también son del interior y se trasladan al microcentro a comprar».
Así, expresó la inviabilidad de establecer horario corrido para el comercio: “Son muchas variables por la cual hoy se ve imposibilitado y que ya hemos hablado y hemos presentado los informes pertinentes. Hablamos con las autoridades y les explicamos a los legisladores que a veces desde sus escritorios toman decisiones que no acompañan absolutamente a las realidades”, agregó.
Además, mencionó la solicitud del sector al gobierno a nivel nacional y provincial de reducir los impuestos que consideran agotadores. Estamos trabajando a perdida pero todavía tenemos la misma responsabilidad que cuando abrimos nuestro negocio, entonces hoy todo no se puede. Pedimos la eliminación de ciertos impuestos, especialmente para los pequeños comercios que trabajan por sí mismos. No puedo pagar el 5% de los ingresos brutos de cada transacción en esta provincia mientras que otras provincias pagan el 1%.
Por último, pidió buscar un norte para mejorar como comerciantes y sociedad. “Son nuevas políticas y son en teoría económicas. Tenemos que ver cómo salir de esta inflación tan agobiante, podemos esperar unos meses más pero más de eso ya no. Los mismos consumidores no tienen ese poder adquisitivo, y un comercio que no vende es un comercio que se cierra. Es un espiral muy negativo”. /El Tucumano