Brecha de género: ningún país del mundo garantiza igualdad, según el Banco Mundial

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Según el organismo, las mujeres tienen sólo dos tercios de los derechos legales de los que gozan los hombres. En Argentina, el Indec calculó en 2023 que la brecha salarial alcanza el 22,6% a favor de los hombres.

El Banco Mundial publicó este lunes un informe que revela que la brecha de género en el mercado laboral es mucho más amplia de lo que se pensaba, dado que las mujeres tienen solo dos tercios de los derechos legales de los que gozan los hombres.

La última edición del informe ‘La mujer, la empresa y el derecho’ apunta que ningún país del mundo brinda igualdad de oportunidades a las mujeres, ni siquiera las economías más ricas.

El Banco Mundial agregó dos indicadores nuevos a su análisis sobre la igualdad de género, que son la seguridad frente a la violencia y el acceso a los servicios de cuidado infantil.

Al incluir estas dos nuevas variantes, el organismo encontró que las mujeres están amparadas, en promedio, por solo el 64% de las protecciones legales de las que disponen los hombres, un valor mucho menor que la estimación anterior, del 77%.

De las 190 economías analizadas, en 98 se han promulgado legislaciones que exigen que las mujeres reciban igual remuneración por trabajo de igual valor, pero solo en 35 de ellas se han adoptado mecanismos de cumplimiento para abordar la brecha salarial.

El organismo pone el ejemplo de Togo, el país africano que más ha hecho por cerrar la brecha, donde las mujeres gozan del 77% de los derechos de los hombres, pero en la práctica este dato es solo del 27%.

«Las mujeres tienen el poder de dar un fuerte impulso a la tambaleante economía mundial. Sin embargo, en todo el mundo, las leyes y prácticas discriminatorias les impiden trabajar o poner en marcha negocios en igualdad de condiciones con los hombres», afirmó Indermit Gill, economista en jefe y vicepresidente sénior de Economía del Desarrollo del Grupo Banco Mundial, en un comunicado.

El informe destaca también que 151 economías cuentan con leyes que prohíben el acoso sexual en el lugar de trabajo, pero solo 40 lo prohíben en espacios públicos, lo que a menudo impide que las mujeres usen el transporte público para trabajar.

Asimismo, las mujeres dedican 2,4 horas al día más que los hombres a tareas de cuidado no remuneradas y solo 78 economías proporcionan algún tipo de apoyo financiero o tributario a padres y madres con hijos pequeños.

En cuanto a la remuneración, las mujeres ganan solo 77 centavos por cada dólar que se paga a los hombres.

Esta brecha afecta también a la jubilación, dado que las mujeres reciben una prestación menor porque dejan por un tiempo el mercado laboral cuando tienen hijos y en muchas economías se jubilan antes que los hombres.

«Urge más que nunca acelerar los esfuerzos para reformar las leyes y promulgar políticas públicas que empoderen a las mujeres para que puedan trabajar, crear empresas y hacerlas crecer», señaló Tea Trumbic, autora principal del informe.

La postura del gobierno argentino

Como parte de la batalla cultural que encabeza el presidente Javier Milei, se dispuso borrar las políticas de igualdad impulsadas en la última década por el feminismo. Tras haber negado la existencia de la brecha salarial entre hombres y mujeres —que las estadísticas oficiales sitúan en el 26,6%— y degradar el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad a subsecretaría, el Gobierno avanzó en la prohibición del lenguaje inclusivo y “todo lo referente a la perspectiva de género” en la Administración nacional.

El argumento oficial es que la perspectiva de género se ha utilizado “como negocio de la política” y contribuye a destruir valores, por lo que considera necesario eliminarla. El Ejecutivo no ha precisado cómo dará marcha atrás con políticas que son transministeriales y que forman parte de compromisos internacionales asumidos por Argentina como la Agenda 2030 de Naciones Unidas o la Convención de Belém do Pará contra la violencia machista. Sin embargo, comienzan a sentirse los efectos del recorte presupuestario en programas clave como la línea 144 para víctimas de violencia de género o los refugios creados para ellas.

“Cuando hablas del 23% de diferencia es cuando se toman los promedios cuando vos corregís por tareas, esa diferencia desaparece, si vos alguna vez hubieras pisado una empresa en serio, no la de los amigos, si vos tendrías razón, tendría que estar lleno de mujeres porque los explotadores capitalistas querrían ganar dinero y cuando vos vas están distribuidos muy equitativamente, por lo tanto esa diferencial que hablas es falso», le dijo Milei a su contrincante Sergio Massa, en el recordado debate presidencial de cara a la segunda vuelta en el 2023.

De acuerdo al INDEC, en el tercer trimestre del año pasado -último dato disponible-, la brecha en Argentina fue del 22,6%. Así, mientras que el salario promedio de los varones fue de $203.580, el de las mujeres estuvo en $157.643.

Otro dato que Milei no tiene cuenta es que el 20% del trabajo que realizan las mujeres es trabajo doméstico. Representan el 98% del millón de personas que viven del empleo doméstico.

La brecha salarial no sólo está documentada sino que además es un tema recurrente de preocupación en los máximos organismos internacionales, desde las Naciones Unidas hasta el Banco Interamericano de Desarrollo.