La guerra entre Rusia y Ucrania sigue cobrándose vidas civiles. Según el Kremlin, el sábado 3 de febrero Ucrania mató a 28 civiles en su último bombardeo en Lugansk, ciudad ocupada del este, contra una panadería rusa.
Entre los fallecidos figuran 18 hombres, 9 mujeres y un niño. Asimismo, 3 personas resultaron heridas de gravedad. Los efectivos de Emergencias pudieron salvar a diez personas.
“Esta es una prueba más del carácter criminal del régimen de Kiev (…) y, como destacó el presidente ruso, Vladímir Putin, de que el Ejército ucraniano se ha convertido finalmente en una organización terrorista», expresó María Zajárova, portavoz de Exteriores, en un comunicado.
De acuerdo a los medios rusos, el ataque del sábado con armamento occidental (un misil HIMARS de fabricación estadounidense) provocó el derrumbe de un edificio de dos plantas que albergaba una panadería colmada de gente en la ciudad de Lugansk. En el momento del impacto del proyectil, se encontraban decenas de personas, entre empleados y clientes.
Moscú volvió a responsabilizar a occidente de suministrar a Kiev mortíferos sistemas de armamento que «asesina a civiles inocentes».
Zajárova afirmó que el bombardeo de Kiev representa el «agradecimiento» ucraniano por la «generosa» asistencia de 50.000 millones de euros aprobada recientemente por la UE.
Lugansk, situada a unos 15 km del territorio controlado por Kiev, contaba con una población de unas 111.000 personas antes del inicio de la ofensiva rusa. Fue tomada por las fuerzas de Moscú la tomaron en el verano boreal de 2022 junto a la ciudad gemela de Severodonetsk después de unas de las batallas más encarnizadas.
Ucrania y Rusia contra civiles
A mediados de enero, Ucrania quedó en el ojo de la tormenta por un ataque que causó la muerte de al menos 25 personas y una veintena de heridos en un mercado de la capital de la región oriental de Donetsk.
Desde hace meses, Moscú acusa a Kiev de cometer actos terroristas contra los territorios ocupados, lo que incluye a la península de Crimea.
A finales de este mes, Moscú acusó a Kiev de derribar con un misil Patriot de fabricación estadounidense un avión de transporte militar ruso Il-76 que transportaba 65 militares ucranianos para su canje.
La realidad es que ambos bandos han cometido durante la guerra actos terroristas para destruir la moral y, por consiguiente, debilitar al enemigo. No sería justo pasar por alto los numerosos civiles asesinados por Rusia. A fines de año pasada, Moscú lanzó el ataque aéreo más masivo contra Ucrania; disparó 110 misiles en toda Ucrania matando a 18 civiles e hiriendo a otros 132.
Un año atrás, un ataque de Rusia contra un complejo de apartamentos en Dnipro, Ucrania, dejó un saldo de al menos 45 muertos.
El 9 de marzo de 2022, pocos días después del inicio de la guerra, las fuerzas rusas bombardearon un hospital materno infantil en la ciudad de Mariúpol, donde murieron 3 personas y resultaron 17 heridos, entre niños, mujeres y médicos.
Pero el atentado más mortal contra civiles ucranianos fue la masacre de Bucha, asesinato masivo de cientos de civiles en la ciudad ucraniana de Bucha por parte de las Fuerzas Armadas Rusas. De acuerdo con la ONU, se han documentado al menos 50 casos. Pero las autoridades ucranianas hablan de 458 cuerpos hallados en la ciudad.
En paralelo, las fuerzas aéreas de Kiev dijeron el sábado que habían interceptado nueve de 14 drones lanzados por Rusia contra el sur y el centro del país que estaban dirigidos a «infraestructuras energéticas» en la región central de Dnipropetrovsk, donde miles de personas están sin electricidad.
En pleno invierno, la intensa campaña aérea rusa del año daña infraestructuras civiles clave y afectan el suministro de electricidad, calefacción y agua sumiendo a los ucranianos en un infierno helado.
Según la ONU, más de 10.000 civiles han muerto en la guerra de Ucrania. Los organismos de derechos humanos afirmaron que la mayoría de las víctimas civiles registradas fueron causadas por el uso de armas explosivas con efectos de área amplia, incluidos bombardeos de artillería pesada, sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple, misiles y ataques aéreos.