El ex presidente de Brasil Jair Bolsonaro atraviesa la segunda audiencia del juicio por presunto abuso de poder, ataque a la institucionalidad democrática y diseminación de fake news con fines electorales -como que el sistema de votación electrónica garantiza el fraude-
el populista de ultraderecha es imputado por parte del Tribunal Superior Electoral (TSE), organismo que sustenta esta acusación en la reunión de Bolsonaro con diplomáticos en julio del 2022 –previo a la asunción de Lula– en la que criticó el funcionamiento de las urnas electrónicas sin material probatorio y sembró dudas sobre su seguridad democrática.
Ahora, según Folha, el TSE que reanuda este martes (27/06) incluyó formalmente un documento ‘borrador’ hallado en un allanamiento en la casa del ex ministro de Justicia Anderson Torres (actualmente con prisión domiciliaria) en el que se detallan los planes para materializar un golpe de estado.
La primera audiencia inició el pasado jueves 22, tal como relató Urgente 24, en la que los magistrados del TSE escucharon los argumentos de la denuncia del Partido Laborista (PDT), la acusación del Ministerio Público Electoral y el relato de la imputación punto por punto por parte del juez Benedito Gonçalves.
Inhabilitación hasta el 2030 o apelar a la Corte
Este documento como nueva prueba junto con la reunión con la diplomacia extranjera a fines del mandato, según la fiscalía, constituiría una artimaña de Bolsonaro para perpetuarse en el poder y en busca de legitimidad internacional del presunto craneado golpe (reunión con embajadores y divulgación de fake news con el uso de la estructura pública como la Tv abierta).
Es decir, los fiscales creen que en la reunión con los embajadores, Bolsonaro “intento dar impresión equivocada de que el proceso electoral” electrónico en Brasil era “oscuro” y propiciaba el fraude, con el propósito de desacreditar el resultado electoral de cara a una victoria de Lula.
Ante este escenario legal, el líder evangelista concedió en exclusiva una entrevista al diario Folha de Sao Paulho, en cual calificó de “absurdo” que el Tribunal Superior Electoral incluya el supuesto planeamiento del ataque civil a la sede de los tres poderes como intento de golpe de Estado y catalogó también ese levantamiento popular como naif en comparación con el motín de Wagner.
Esta imputación -más otras 15 como la de “autor intelectual del intento de golpe”- contra Jair Bolsonaro podría conducirlo a la inhabilitación por ocho años en cargos públicos y truncarle así cualquier candidatura política. No sólo el ex mandatario es acusado de abuso de poder y mal uso de los medios de comunicación, sino también su ex compañero de fórmula Walter Braga Netto.