Vladimir Putin, Transnistria y codicia geopolítica: OTAN detrás

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Vladimir Putin revocó un decreto (2012) que reconocía la soberanía de Moldavia –ex parte de la URSS– en medio de acusaciones cruzadas entre el Kremlin y Kiev en torno a operaciones militares en esta región. Mientras que, Rusia afirma que Ucrania está preparando una emboscada y un ataque de ‘bandera falsa’ liderado por la OTAN en el estado separatista de Transnistria, donde se hallan las bases y el personal militar ruso, Zelenski denuncia que Putin está especulando con ello para legitimar una invasión en Moldavia- “En tres días, las Fuerzas Armadas de Ucrania pueden resolver el problema de la captura de Transnistria”, dijo el ex asesor del jefe de la Oficina del Presidente de Ucrania, Oleksiy Arestovich. Sin embargo, las autoridades rusas denuncian que los “saboteadores ucranianos” planean vestirse de soldados rusos antes de llevar a cabo la invasión a Transnistria, como manera de inculparlos y así justificar su ingreso a Moldavia.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia comunicó (24/02/23) que registró «un aumento sin precedentes de vuelos de aviones no tripulados de las Fuerzas Armadas» y avistaje de unidades militares ucranianas en la frontera con Modalvia, además de despliegue de posiciones de tiro. A su vez, Rusia advirtió a Estados Unidos, a Kiev y la OTAN que responderían con un ataque ante una represalia extranjera en Transnistria.

Advertimos a Estados Unidos, a los países miembros de la OTAN y a sus pupilos ucranianos contra los próximos pasos aventureros

“Nadie debe tener dudas de que las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa responderán adecuadamente a la provocación del régimen de Kiev, si la hay, y garantizarán la protección de nuestros compatriotas, el contingente ruso de mantenimiento de la paz, el personal militar del Grupo Operativo de las fuerzas rusas y depósitos militares en la aldea de Kolbasna en Transnistria. Cualquier acción que represente una amenaza para su seguridad será considerada de acuerdo con el derecho internacional como un ataque a la Federación Rusa como fue el caso en Osetia del Sur cuando nuestras fuerzas de paz fueron atacadas por Saakashvili», dijo el Ministerio a través de un comunicado.

Aunque el Ministerio de Defensa de Moldavia refutó la supuesta invasión ucraniana en Transnistria y solicitó a su conciudadanos que «consulten la información de fuentes oficiales o verificadas», su homólogo ruso declaró que las tropas ucranianas están craneando una ‘provocación armada’ en esta región.

Rusófonos y ‘rusofóbicos’

La República de Moldavia, uno de los países de Europa más pobres — cerca del 41% de su población vive con menos de 5 € al día— se independizó de la Unión Soviética en 1991. Pero una franja de su jurisdicción reconocida internacionalmente como moldava, Transnistria, está bajo control de facto de un gobierno separatista proruso desde 1991, debido a que unos 470.000 de sus habitantes hablan ese idioma y no se sienten identificados culturalmente con Moldavia, un caso análogo al de la cuenca de Donbass en Ucrania. De hecho, este estado separatista ha conservado simbológica de la URSS, como el martillo y la hoz comunista, presente en su bandera.

Situada a 400 kilómetros entre la orilla oriental del río Dniéster en Moldavia y la frontera del país con Ucrania, es un enclave importante para las tropas de Putin y de Zelenski, dada la cercanía con el conflicto bélico. Ahora, un contingente de 1500 soldados rusos se halla enquistado allí, además de bases militares desde hace tres décadas.

Cabe destacar que la política de seguridad de Rusia establece que tiene derecho a proteger a las poblaciones de etnia rusa en todo el mundo, lo cual justificaría la toma de Transnistria por parte del Kremlin si los rusófonos residentes estuvieran en riesgo dada la supuesta inminente invasión ucraniana, según especula el Ministerio de Defensa.