Laruptura de cuatro senadores con el bloque del Frente de Todos sigue dando qué hablar, sobre todo luego de que el Senado este jueves (23/02) no lograra quórum para sesionar. En las últimas horas hubo varios trascendidos, voces en off y una certeza: mientras Alberto Fernández estaba en ‘Narnia’ -como muchos bromearon por su cadena nacional desde la Antártida- Cristina Fernández de Kirchner lo primereó y se lavó las manos a lo Poncio Pilato. El Presidente se enteró de la ruptura del bloque del FdT del Senado mientras se sentaba en el avión para volver de Tierra del Fuego. Recién cuando arribó a Buenos Aires conoció la historia completa, y se enteró de la ‘jugada’ de CFK: como titular del Senado, difundió la nota de Guillermo Snopek anunciando la conformación del nuevo bloque Unidad Federal, con durísimas críticas a Alberto.
Muy hábil Cristina Kirchner difundiendo rápidamente ese comunicado, achacándole al mandatario la responsabilidad por la fractura del bloque FdT.
“Motiva mi decisión, en primer término, la distancia cada vez mayor que siento respecto al rumbo de gestión del presidente de la Nación, Alberto Fernández, alejado -a mi humilde entender-de las prioridades que nuestro pueblo demanda”, sostuvo en su renuncia Snopek en la carta difundida por CFK.
«No puedo dejar de señalar la falta de incidencia favorable que el presidente ha tenido en los últimos tiempos para con Jujuy», agregó el senador. Y remató: «Ha sido, en ese sentido, una gran decepción para todos los que creímos que la asunción de Alberto Fernández podía representar un nuevo porvenir».
Según explicaron voceros de la Casa Rosada al diario La Nación, que sabían que Edgardo Kueider (Entre Ríos) y Carlos Espínola (Corrientes), “se querían ir hace tiempo” y que esa voluntad “no era por el Gobierno”. En esa línea agregaron las fuentes oficiales que “Fernández hizo lo imposible” para que eso no sucediera. “Ellos querían hace rato tener un bloque propio, de ‘peronismo puro’, por llamarlo de algún modo y Alberto hizo mucho para que se mantuvieran adentro”, detallaban.
Sin embargo, Kueider -en el programa ‘Modo Fontevecchia‘- negó haber recibido, en las horas previas a la confirmación, el llamado de algún dirigente del oficialismo.
«Ninguno de nosotros recibió ningún llamado, a pesar de que la noticia ya se había filtrado algunas horas antes de que se oficializara. Evidentemente a nadie le interesa mucho o no hay tanta preocupación«, lanzó.
En tanto, uno de los senadores ‘rupturistas’ -de quien Perfil no da nombre- dejó en claro que la «bronca» también es con Cristina Kirchner.
«La bronca es con ambos. Es con la interna que se lleva puesto todo. Pero Cristina aprovechó que Alberto siempre tarda en reaccionar y mostró la carta de Snopek que lo destruye. La próxima, que se quede más cerca. En la Antártida quizás no tiene señal», lanzó en off.
Sobre la salida del FdT, explicó que «se conjugaron varios aspectos. La alianza de Juan (Schiaretti, gobernador de Córdoba) con Alberto (Rodríguez Saá, mandatario de San Luis) obvio que tuvo que ver. La falta de gestos tanto de Alberto como de Cristina también. Hay que entender que los senadores damos respuestas en nuestras provincias. No pasamos desapercibidos como los diputados. Quedamos expuestos ante la falta de fondos. Si eso pasa, en un año electoral hay que romper. Eso no es novedad», analizó