En los últimos días, la japonesa Toyota anunció una fuerte inyección de dinero en Brasil para la producción de un nuevo vehículo. Se trata de una pick up compacta, que se sumaría a la familia de las camionetas en la región, principalmente dominada por Hilux.
La cifra, que rondaría los 2.5 mil millones de dólares, estaría destinada a financiar este y otros proyectos de cara a los próximos años. Todo confirmado por el propio Gobierno de Brasil.
En cuanto al proyecto de la nueva camioneta, se trataría de una monocasco, con la que Toyota intentará entrar a un segmento que va tomando temperatura. En él ya conviven productos como Ram Rampage, Ford Maverick, Chevrolet Montana y más atrás Fiat Strada, el utilitario de ese segmento con mayor éxito en tierras brasileñas.
Así, la nueva pick up de Toyota compartiría ADN con Corolla y Corolla Cross, que ya son fabricados en Brasil bajo la plataforma modular TNGA-C. Eso implica un ahorro de coste productivo muy importante para la marca japonesa.
Al producirse en la planta de Sorocaba, el nuevo producto comenzaría su fabricación en 2027. Cabe recordar que Toyota tiene su complejo industrial brasileño trabajando al 100% de su capacidad.
Toyota se mete a un segmento poblado
Para las pick ups compactas, el ingreso de Toyota sería la estocada final para pasar al frente en materia de utilitarios. Al contrario de lo que sucede en Norteamérica, donde la demanda de camionetas fullsize supera al resto de los segmentos, en la región se apunta a vehículos versátiles de tamaño, aunque con fuerte potencia.
Un ejemplo de ello es Ram Rampage, que en sus versiones más equipadas brinda nada menos que 272 caballos, superando incluso el poder de las camionetas medianas como Hilux, Amarok y otras. Además, Toyota tendría la posibilidad de desembarcar en esa liga directamente con motorizaciones híbridas, y cumpliendo con las normativas ecológicas que se irán activando rumbo al 2030.