Los precios se transformaron en los últimos tiempos en el país en un tema que cala hondo en el bolsillo de toda la sociedad. El efecto inflacionario impacta de lleno en las distintas actividades productivas y eso se termina reflejando en aumentos que llegan hasta el consumidor. El precio del pan no escapa a esta realidad y su costo va variando permanentemente.
Pablo Albertus, titular del Centro de Industriales Panaderos de Tucumán, habló respecto al momento que atraviesa el sector en el actual contexto económico. «La situación lamentablemente no es de las mejores. La inflación viene golpeando también a las panaderías», explicó. En ese sentido marcó que en el mes pasado sufrieron una suba de 20% en el precio de los insumos.
El empresario señaló que «cuando aumentás de precios generalmente tenés descenso de ventas». Y agregó que la coyuntura inflacionaria que hay en el sector, afecta a través del aumento en las materias primas y los servicios. Y a eso hay que sumarle el aumento en el valor de los combustibles y los acuerdos que se han pactado para mejoras salariales.
Albertus informó que desde el Centro de Industriales Panaderos realizaron un estudio de costos que les dio como resultado un aumento sugerido de 10% a 15% para el precio del kilo de pan que costaría en un rango de los $1.800 a los $2.000. En cuanto a las especialidades (galletería, masitería, gallletería, sandwichería) el aumento sugerido ronda entre un 10% a 12%.