Destruido: Avión venezolano-iraní fue despedazado por USA

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Finalmente, la historia del avión Boeing 747 de Emtrasur que llegó a Argentina con agentes venezolanos e iraníes durante el 2022 tuvo su conclusión en Miami, Estados Unidos. Allí, luego del decomiso de las autoridades estadounidenses, la unidad pasó a desguace y fue destruída por disposición de la Justicia.

La aeronave, con matrícula YV3531, viajó al país del norte desde Ezeiza el pasado 12 de febrero, luego del final de un largo proceso de peticiones que Estados Unidos le hizo a Argentina. Cabe recordar que dicho avión permaneció aparcado en Ezeiza casi dos años bajo el Gobierno de Alberto Fernández.

Según las autoridades estadounidenses, el Boeing 747 estuvo íntimamente relacionado con presuntas actividades terroristas. En el pasado, registró un paso por Mahan Air, la aerolínea de bandera de Irán.

Con el cambio de gestión en Argentina, los permisos de la Justicia local para extraditar la aeronave a USA se aceleraron. Y su destino final fue un «desguazadero» a las afueras de Miami, a cargo del Gobierno estatal.

Desde Venezuela condenaron el accionar destructivo del Gobierno de Estados Unidos, al que calificaron como “capricho infantil”. Todo en el marco de los conflictos geopolíticos que enfrentan a ambas naciones hace varios años.

El avión que fue destruido. 

El avión que fue destruido.

El avión y su paso por Argentina

La localización del Boeing 747 de Emtrasur comenzó en junio del 2022. En ese entonces, el avión entró a espacio aéreo argentino desviando a Córdoba por inclemencias temporales en Montevideo.

En esa provincia, el avión volvió a despegar rumbo a Montevideo, Uruguay, para repostar combustible. Algo que no sucedió ya que se le negó la entrada al espacio aéreo uruguayo.

Así, el Boeing terminó virando hacia Ezeiza, donde las autoridades argentinas constataron una serie de irregularidades importantes. Entre ellas, pasajeros con antecedentes terroristas.

Tanto la tripulación como el avión permanecieron detenidos en el país durante meses. Hasta que Estados Unidos pidió el decomiso del aparato, que había sido moneda de cambio entre naciones sancionadas internacionalmente.