En un contexto inflacionario alto, una crisis económica y el aumento desmedido de productos de primera necesidad, a través del director de Cáritas, la iglesia volvió a pedir al Gobierno nacional, alimentos para los comedores.
Con el propósito de conversar sobre el tema, se comunicó con el filósofo, obispo, teólogo y director de Cáritas, Carlos Tissera: «La crisis es por todos lados, Cáritas desde hace mucho tiempo viene teniendo convenios alimentarios con el Gobierno nacional, también con gobiernos provinciales, municipales, etc. El que se ha firmado el otro día es de viviendas».
El obispo recalcó la importancia de que se conozca a quienes va destinada la ayuda para la obtención de alimentos, algo que fue plasmado por la Comisión Episcopal de Cáritas en el documento.
Asimismo, dijo que conocer los destinatarios también resulta clave para «ir formando comunidades, no solamente individuos», donde no solo intenten resolverse aspectos relacionados a la alimentación sino también asuntos comunitarios tales como vínculos y educación, «cosas que también son elementales para la gente humilde».
Finalmente, hizo hincapié en la construcción de lazos sociales y la inversión que debería realizarse para la multiplicación de centros comunitarios y dijo que esto es «bueno» porque «busca esa formación integral de la persona» y «todo lo que hace a la dignidad» de la misma.