La cuadra de España al 500 mostró ayer una cara completamente diferente a la habitual. Frente a la sede del Ministerio de Capital Humano de la Nación se congregó una larga fila de personas que reclamaba el cumplimiento de «la promesa» de la ministra Sandra Pettovello de atender uno por uno a quienes días atrás exigieron el cumpimiento de la ayuda alimentaria en Buenos Aires.
La «Fila del Hambre» en Rosario se convocó en la sede del Ministerio, donde sólo estuvieron para recibirlos empleados de carrera que no tenía instrucciones de ningún tipo.
“No nos pudieron recibir porque no hay funcionario todavía. Tratan de comunicarse con Buenos Aires para que les den un sistema sobre cómo anotarse, los que están acá son los que van a buscar comida en los comedores, de los cuales han cerrado la mitad”, explicó una de las mujeres que estaba en el lugar.
“Es una una vergüenza porque juegan con el hambre de la gente, nos agarran de juguete”, lamentó, mientras otra de las manifestantes anunció que se volvían a sus casas ya que no iban a ser atendidos.
La Unión de Trabajadores de la Economía Popular expuso en Rosario, Buenos Aires y otras ciudades del país, que los argumentos usados por la ministra Pettovello para rechazar los reclamos para regularizar la asistencia alimentaria son falsos.
La ministra había dicho la semana pasada que recibiría «una por una a la gente que tiene hambre» para así evitar intermediarios en la entrega de asistencia, en relación a las organizaciones sociales y piqueteras.
Sin embargo, ante la movida de las organizaciones sociales no hubo respuestas. En Rosario, sólo había empleados de planta sin instrucciones ni indicaciones oficiales.
La movida coincidió con las denuncias de que el Ministerio de Capital Humano demora la entrega de partidas y con el documento que en las últimas horas emitió la Conferencia Episcopal Argentina en el que le advirtió al gobierno de Javier Milei que “la comida no puede ser una variable de ajuste”, y subrayó la necesidad de que la asistencia “llegue sin dilación” a comedores populares y organizaciones de la sociedad civil,
También trazó un panorama de la situación alimentaria el secretario de Desarrollo Humano de la ciudad, Nicolás Gianelloni. “Más allá de la discusión que se está dando a nivel nacional, hay una realidad concreta del aumento de la pobreza. Desde hace varios meses los distintos gobiernos nacionales han tenido una discontinuidad de los programas de asistencia alimentaria y los gobiernos municipal y provincial hemos reforzado esa ayuda, sobre todo en diciembre y enero”, afirmó en declaraciones a Radio 2. Para Gianelloni, “el Estado no puede retirarse de la asistencia alimentaria y hay programas que tienen que seguir funcionando como la tarjeta Alimentar o la Asignación Universal por Hijo (AUH)”.