Masiva destrucción en Jersón: Rusia y Ucrania cruzan denuncias

Comparte si te ha gustado

Este martes (06/06/23) la explosión de la central hidroeléctrica Nova Kajovka de 30 metros de alto y cientos de metros de ancho en el río Dnipro Kherson conmocionó a Rusia y a Ucrania que no demoraron en cruzar acusaciones. Por el momento ante las versiones contrarias se desconoce el responsable de tal destrucción pero sí sus trágicas consecuencias para los residentes de allí.

El desbordamiento podría afectar hasta a 80 localidades de la región, la mayoría de ellas situadas en territorio ocupado por las fuerzas rusas. Ucrania ha cifrado en 16 000 el número de personas que viven en la “zona crítica” más expuesta a las inundaciones; Rusia dijo que afectará a 14 asentamientos y 22.000 personas.

Expertos aseguran que el agua subió a ocho metros en el Dnieper y hasta 5,3 metros en Korsunk que aquel durará unas 72 horas.

En esa línea aseguraron que la destrucción está provocando y provocará catastróficas inundaciones sobre todo en pueblos controlados al ejército; Mykolivka, Olhivka, Lyovo, Tyaginka, Poniativka, Ivanovka, Tokarivka, Poniativka, Prydniprovske, Sadove y parte de la ciudad de Jersón.

El desbordamiento de la represa perjudica a miles de civiles por la inundación de varios pueblos, hogares, negocios, devastando la economía y las estructuras de soporte vital; algunos incluso ya están hablando de ecocidio.

Versión ucraniana

El primero en manifestarse fue Volodymyr Zelensky que acusó a Rusia “terrorista” del estallido y pidió a las personas que viven río abajo que evacúen ante las catastróficas inundaciones.

«Terroristas rusos. La destrucción de la presa de la central hidroeléctrica de Kajovka no hace sino confirmar al mundo entero que hay que expulsarlos de todos los rincones de la tierra ucraniana. No se les debe dejar ni un metro, porque utilizan cada metro para el terror. Sólo la victoria de Ucrania devolverá la seguridad. Y esta victoria llegará. Los terroristas no podrán detener a Ucrania ni con agua, ni con misiles, ni con nada.

Según Kiev, los daños son “irreparables” y la explosión provino del interior de la represa, “una detonación en la sala de máquinas desde el interior”.

“Como resultado de la detonación de la sala de máquinas desde el interior, la central hidroeléctrica de Kajovka ha sido completamente destruida. La central no puede ser reparada”, aseguró por su parte la empresa pública hidroeléctrica ucraniana, Ukrhidroenergo, en un comunicado. Curiosamente luego añadió que podría volver a “estar operativa” en un plazo de “cuatro días”.

Versión rusa

Por su parte, con una versión totalmente diferente, Rusia culpó a Kiev del estallido por bombardeos ucranianos que destruyeron las válvulas de la central hidroeléctrica de Kajovka.

Según SputnikNews, “provocando el derrumbe de tres tramos por la presión del agua. Agregaron que las tropas ucranianas atacaron la central hidroeléctrica supuestamente con el lanzacohetes múltiple Oljá”.

RIA Novosti sostiene que “los bombardeos del ejército ucraniano destruyeron la parte superior de la central hidroeléctrica Kakhovskaya. El golpe, presumiblemente, lo dio el Alder MLRS”.

El alcalde Vladímir Leóntiev calificó lo sucedido como un ”acto de terrorismo por parte de Ucrania”. Añadió que la presa no se puede reparar ahora sino que habrá que reconstruirla de nuevo. «Creo que habrá que construirla de nuevo después de nuestra victoria, como se hizo en la década de los 1950».

Dmitry Peskov, el portavoz del Kremlin, a su vez sentenció: «Podemos afirmar inequívocamente que estamos hablando de un sabotaje deliberado por parte de Ucrania». Según él, ante la supuesta frustrada ofensiva ucraniana, Kiev quiere distraer la atención.

Mientras Rusia anunció que el Comité de Investigación oficial ya ha iniciado una investigación criminal sobre la voladura de la represa de Nova Kakhovka, según pudo saber Reuters, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania convocó una reunión urgente del consejo de seguridad de la ONU para discutir «acto terrorista ruso contra la infraestructura crítica de Ucrania».

Crimea sin agua

Los rusos también argumentaron que es un acto de venganza de Ucrania ya que debido a la destrucción de la represa Crimea padecerá problemas de suministro. El agua del embalse abastece a la península de Crimea, al sur, anexionada por Rusia en 2014, y a la central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa, al norte.

«La única amenaza es que por el momento tendremos problemas con el suministro de agua a Crimea», recalcaron, porque existe riesgo de que el Canal de Crimea del Norte -de más de 400 kilómetros de largo que se origina en el embalse de Kajovka, donde se encuentra la presa dañada, y se construyó entre 1961 y 1971 para proporcionar agua a las áreas secas de la región de Jersón y Crimea- se vuelva poco profundo.

Rusia dice que Crimea padecerá problemas de suministro de agua por la destrucción de la represa.

Rusia dice que Crimea padecerá problemas de suministro de agua por la destrucción de la represa.

Peskov sin filtro acusó: “Es evidente que este sabotaje tenía como uno de sus objetivos privar de agua a Crimea. El nivel de agua en el depósito baja y, en consecuencia, se reduce el suministro al canal. Se está reduciendo drásticamente».

Por fortuna, Renat Karchaa, asesor del director general de Rosenergoatom, aclaró que no existe ninguna amenaza por ahora para la seguridad de la central nuclear de Zaporozhie a pesar del incremento crítico del agua por la explosión de Nova Kajovka que podría al mismo tiempo afectar a la presa Kamianka-Dniprovska.