Desde hace unos meses, madres se instalaron en la plaza Independencia con la necesidad de ser atendidas. Es que sus hijos están tremendamente perdidos en la adicción de las drogas y no hay forma de ayudarlos.
Hasta el momento, ellas están sumergidas en la indiferencia de todos. El móvil de Los Primeros se acercó y pudieron contar su historia, dura historia.
«Nuestros hijos nos ven como enemigas«, comentaron. Sólo piden que se abran los hospitales para rescatar a los chicos adictos.