Por mucho tiempo la ciencia ha buscado responder ¿Qué provoca el aumento de peso? Y aunque sabemos que el factor principal es seguir una dieta poco saludable, los científicos han ido más allá. Ahora, un estudio pone en relieve la complicada relación entre el intestino y el aumento de peso. Y es que, los científicos hallaron que las toxinas del intestino, o fragmentos de bacterias que se filtran al cuerpo desde el intestino, podrían causar daño en las células grasas e impulsar el aumento de peso. El estudio fue realizado por científicos de la Universidad de Nottingham Trent y publicado recientemente en la revista BMC Medicine.
De acuerdo con The Guardian, los investigadores encontraron que fragmentos de microbios, conocidos como endotoxinas, pueden ingresar en la sangre y afectar directamente el funcionamiento de las células grasas, que son las que forman el tejido adiposo.
Estos hallazgos, según los autores del estudio, ayudan a arrojar luz sobre cómo las endotoxinas pueden provocar obesidad y enfermedades asociadas, como la diabetes tipo 2.
La diabetes es una enfermedad que supone niveles de azúcar en sangre más elevados de lo normal.
Asimismo, los científicos creen que las intervenciones para perder peso, como la cirugía bariátrica, «pueden revertir el daño que nuestro intestino puede causar a nuestras células grasas, lo que en última instancia tendrá un gran impacto en nuestra salud».
¿Qué son las endotoxinas?
Las endotoxinas son componentes presentes dentro de las paredes celulares bacterianas y son liberadas cuando se rompe o se desintegra.
Estas toxinas se introducen en el torrente sanguíneo, así es como alcanzan las células grasas e incluso algunos órganos como el hígado, esto último lo reseña ScienceDirect.
Ahora bien, The Guardian explica que, en un intestino sano, las endotoxinas son parte del ciclo de vida de los microbios que juegan un papel clave en la salud humana.
Sin embargo, en las personas con obesidad, la barrera intestinal es más frágil y puede tener fugas, lo que permite que las endotoxinas se filtren, entren en la sangre y en otras partes del cuerpo.
Endotoxinas y aumento de peso
En el nuevo estudio, los investigadores evaluaron a 156 personas, de las cuales 63 sufrían de obesidad. El trabajo científico también incluyó personas que se habían sometido a una cirugía bariátrica.
El objetivo de los científicos era comprender cómo las endotoxinas intervenían en el aumento del riesgo de obesidad y diabetes tipo 2.
Para ello, el equipo recolectó muestras de sangre y grasa de los participantes. Luego, examinaron las células grasas blancas, que almacenan energía, y las células grasas marrones, que usan energía y están asociadas con la actividad metabólica.
Descubrieron, dice The Guardian, que las células grasas blancas derivadas de personas con obesidad tenían menos probabilidades de transformarse en células grasas de color marrón, en comparación con las células grasas de personas delgadas.
Según los investigadores, probablemente esto se deba a los niveles más altos de endotoxinas que se encuentran en la sangre de los participantes con obesidad.
También, el equipo halló que la cirugía bariátrica redujo la cantidad de endotoxinas en la sangre de los participantes, y esto se relacionaba con una mejor salud metabólica de las células grasas.
“La endotoxina del intestino reduce la actividad metabólica de las células grasas y su capacidad para convertirse en ‘células grasas similares a las marrones’ que pueden ser útiles para ayudar a perder peso«, explicó el investigador principal, el profesor Mark Christian, de la escuela de ciencia y tecnología de la Universidad de Nottingham Trent.
“Nuestro estudio destaca la importancia del intestino y la grasa como órganos críticos interrelacionados que influyen en nuestra salud metabólica”, agregó.
Finalmente, Trent dijo: «Como tal, este trabajo sugiere que la necesidad de limitar el daño de las células grasas inducido por endotoxinas es aún más importante cuando se tiene exceso de peso, ya que la endotoxina contribuye a reducir el metabolismo celular saludable».