Uno de los principales aliados estratégicos y militares de Ucrania en la Guerra contra Rusia, Polonia, decidió apropiarse del colegio de la Embajada rusa en Varsovia, conocido como el “nido de espías”, cerrado y maltrecho desde el inicio de la invasión.
Tras años de litigios, la ciudad de Varsovia ha expropiado un complejo de edificios sosteniéndose en una presunta sentencia judicial que declara al Estado polaco propietario del edificio.
Según Ria Novosti, “el 1 de marzo del año pasado, las autoridades polacas anunciaron el inicio del proceso de incautación de bienes inmuebles en Varsovia, que se considera en «posesión ilegal de Rusia».
Por ello, el sábado (29/04/23) “en la víspera de la mañana, representantes del Ayuntamiento de Varsovia, acompañados por la policía, llegaron a la escuela, rompieron la puerta y entraron al edificio”.
Se trata del complejo de los edificios en la calle Kieletska 45, donde se encuentra la escuela, y en la calle Sobieski 100, lugar donde solían vivir los diplomáticos y militares rusos y asistir a clases sus hijos. En Polonia sospechaban que en aquellos centros educativos se engendraban los espías rusos.
La fuerte reacción de Moscú era esperable. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia Serguéi Lavrov aseguró que “un paso tan descarado de Varsovia no se quedaría sin una dura reacción y consecuencias para las autoridades polacas y los intereses de Polonia en Rusia».
Es que para Rusia es una violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas mientras Varsovia asegura que la medida se tomó a raíz de una orden judicial.
Sin embargo Rusia ya comunicó medidas. Según medios locales, la escuela de la embajada rusa en Varsovia comenzará a funcionar el 10 de mayo en un edificio diferente.
«Después de las vacaciones de mayo. Después del 9 de mayo. La próxima semana será necesario retirar el equipo, la propiedad de la escuela y colocarla en un lugar nuevo. Después de que todo esto esté organizado, creo que las clases se llevarán a cabo como de costumbre a partir del 10 de mayo», manifestó el embajador de Rusia en Polonia Sergei Andreev a la agencia rusa.
También anunció que los diplomáticos rusos presentarán una protesta contra la toma por la fuerza del edificio de la escuela el 2 de mayo, cuando las instituciones estatales polacas reanuden su trabajo.
Perímetro Kaliningrado
Por si fuera poca, la expresión de animosidad y desconfianza polaca hacia Rusia, el gobierno anunció la creación de un perímetro de defensa a lo largo de la frontera con el enclave ruso de Kaliningrado.
El primer ministro Mateusz Morawiecki, dio a conocer en Bartoszyce la noticia argumentando la intención del traslado de nuevas unidades militares a la zona nueva y el despliegue de armas más modernas.
«Construiremos salvaguardias adecuadas a lo largo de toda la franja fronteriza, tanto físicas como electrónicas, es la llamada perimetría. Desarrollaremos esta perimetría. También reforzaremos la presencia de la Guardia de Fronteras, de todos los servicios. Esta presencia ya se ha reforzado, pero continuaremos este proceso».
A fines de enero de este año, el propio Morawiecki, informó el aumento considerable del presupuesto de defensa en Polonia (alcanzará 4 % del PIB) a raíz de la guerra ruso-ucraniana.
«La guerra en Ucrania nos obliga a armarnos aún más rápido. Por este motivo, haremos un esfuerzo sin precedentes», había dicho a la prensa en una base militar del este del país. «Será probablemente el nivel de gasto militar más alto de todos los países de la OTAN».
En la última visita de Volodimir Zelenski a Polonia, ésta adelantó el envió de 4 caza Mig-29 a Ucrania, lo que eleva el total a ocho de aquellos aviones de combate polacos entregados.