«Por cuestiones climáticas, que no ayudaron a que los cultivos lleguen de forma óptima, la prezafra fue difícil. De igual manera, debemos esperar los relevamientos que se realizan sobre los campos para saber cual es el estado real y poder presumir como será esta zafra. Pero posiblemente, por la sequía, no estemos en lo mismos volúmenes del año pasado. A más tardar a mediados de mayo se va a conocer el informe», contó .
Según advirtió, los relevamientos que se hicieron de manera anticipada arrojaron que posiblemente la disminución de cañaverales en pie alcance el 10%. «Esperemos que el clima siga acompañando para que tengamos la mejor zafra posible. Tenemos que ser cautos en este sentido a la hora de revelar pronósticos. Cuando tengamos los informes de la Estación Experimental Obispo Colombres podremos tener un panorama más claro», agregó.
En cuanto al bioetanol, señaló que las empresas no cumplen al 100% sus cuotas de producción y que la competitividad en ese rubro no es la esperada. «La industria va cambiando y hoy esta dirigida a abastecer energía. Los cupos determinados por la Secretaría de Energía se cumplen, pero no de la manera esperada. El año pasado hubo un desfasaje en la entrega. Es decir, no se cumple al 100%, pero de alguna manera si se cumple», sostuvo.
Y añadió: «Se necesita una mejora en el valor del bioetanol para que se pueda volcar mayor cantidad de caña a la producción de energía renovable. El precio del azúcar hoy es muy bueno, pero necesitamos que se tonifique el precio del alcohol para que sea más competitivo».
Por último, recordó que «esto trae beneficios económicos para el sector, pero también trae beneficios para la sociedad en cuanto que mejora la cuestión ambiental. La materia prima de la caña de azucar tiene muchas áreas para explotar. Argentina tiene que seguir el ejemplo de Brasil y mejorar el corte de bioetanol. Ese es el futuro de la industria».