Voluntad Popular: El puente roto de la oposición En Venezuela

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Partido político nacido en los últimos años de Hugo ChávezVoluntad Popular (VP) es creado por Leopoldo López en el 2009 y formalizado en el 2011, una división de Primero Justicia, otro partido de derecha. En el 2012 tuvo su primera participación electoral en las presidenciales del 7 de octubre, dando respaldo al candidato Henrique Capriles Radonski.

La historia de este partido es una síntesis de la oposición venezolana, su propuesta programática es ambigua, su estructura es clásica, discursos centrados en radicalismos, sus acciones reducidas a la búsqueda de atajos para llegar al poder, una critica automática a todo lo que huela a chavismo.

No poseen fuertes vínculos a comunidades populares, organizaciones sociales o fuerzas sindicales, su participación política se concentra en la formalidad de las instituciones (parlamentos, alcaldías y gobernaciones) mas que en la organización del pueblo o la sociedad civil.

Voluntad Popular es el partido de toda la oposición venezolana con mayor respaldo internacional y proyección mediática, pero a lo interno de acuerdo con las últimas mediciones de simpatía del electorado solo registra un apoyo del 1,26% (Datincorp – Reporte General febrero 2023). Sus integrantes han sido expuestos como héroes y abnegados defensores de la libertad, el caso más emblemático es Leopoldo López, líder del partido a quien algunos hacen la osada comparación con Nelson Mandela.

Leopoldo López, creador del partido Voluntad Popular. A su lado, el coordinador político Carlos Vecchio.

Leopoldo López, creador del partido Voluntad Popular. A su lado, el coordinador político Carlos Vecchio.

Leopoldo López estuvo preso durante 5 años, su causa judicial con sentencia firme, lo responsabiliza de la organización y participación en jornadas de acciones violentas conocida como “La Salida” en 2014 que dejaron un saldo de 43 muertos y cientos de heridos.

Esta organización está en antagonismo a Maduro, planteado así es sin duda un atributo positivo, pero cuando lo vemos de cerca nos percatamos que es proporcionalmente diferente e igual al madurismo.

López, líder indiscutible de VP, encarna el radicalismo de derecha, ha participado, organizado y defendido todas las opciones violentas e inconstitucionales para cambiar de gobierno, el golpe de 2002, el paro petrolero de 2002-03, las “guarimbas” (Acciones callejeras de enfrentamiento con los cuerpos de seguridad) de 2004, 2014, 2017 y finalmente la “sublevación militar” encabezada por Juan Guaidó y militares activos en abril 2019, derrotada mas por su incapacidad que por la acción defensiva de Maduro.

La visibilidad de Voluntad Popular es consecuencia de una importante inversión financiera y política, la estrategia hemisférica ha apostado por acentuar las expresiones mas radicales de derecha, en el caso de Venezuela, VP ha recibido importantes respaldos de instituciones, organizaciones y empresas internacionales.

Algunos de esos financiamientos, alrededor de 1.500 millones de dólares, han sido denunciados por manejo irregulares de fondos de empresas públicas, como es el caso de la empresa Monómeros, filial de PDVSA que opera en Colombia y que estaba bajo control de la administración de la extinta Presidencia Interina (Guaidó es militante de Voluntad Popular).

Los números hablan: Nicolás Maduro vs Juan Guaidó.

Los números hablan: Nicolás Maduro vs Juan Guaidó.

La resonancia internacional de VP y sus alianzas le asegura influenciar y operar en otros mercados políticos, por ejemplo, asesorar al presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien tiene como principal asesor a Lester Toledo, miembro de la dirección nacional de VP ¿Cómo se explica que esta organización que no ha tenido ningún éxito significativo siga recibiendo tanto apoyo y financiamiento?

Luego de presidir el fracasado Gobierno Interino, Voluntad Popular ha perdido espacios internos de manera abrumadora, sin lograr posicionar ningún líder en la agenda electoral, muy por el contrario, en una reciente encuesta Guaidó es el único candidato de la oposición que perdería ante Maduro, estando por encima de él un comediante llamado El Conde del Guacharo”.

Es posible que las principales razones de su fracaso obedezca a varias causas: el manejo turbio de los recursos, la incapacidad para aglutinar internamente las voluntades de cambio, el sectarismo interno, la ausencia de una propuesta seria para superar la crisis, los débiles esfuerzos por captar al sector militar activo, entre otras muchas causas, pero hay una razón clave, una que obedece a la naturaleza política de esta organización, eso que los une y los motiva, la representación que tienen de ellos mismos en referencia a los otros.

Esta organización está mas cerca de la autorrefencialidad que de la empatía, mas cerca del fascismo que de la búsqueda de consenso y participación, se consideran elegidos para ser la vanguardia de la lucha contra la dictadura.

Para Arthur Schopennhauer, filósofo alemán “la voluntad es una fuerza que obra sin motivo, irracionalmente; es como el motor ciego de la historia. Todas las energías de la naturaleza son expresivas de la Voluntad.”

Para este filósofo esta voluntad está directamente vinculada al concepto de representación y lo define en una contundente frase “El mundo es mi representación”, “Nadie puede salirse de si mismo para identificarse directamente con las cosas distintas a el”.

Estos conceptos sintetizan la actitud con la cual VP asume la política, la diferencia con el pensamiento de Schopennhauer es que este filósofo la voluntad debe estar regida por el principio de la razón y dentro de VP no hay una racionalidad política democrática y plural, solo la voluntad instintiva y primitiva de hacerse de su objetivo: el poder político a toda costa.

Es por esto que son diferentes e iguales a Nicolás Maduro, ambos son motivados por el poder, preservarlo para uno y arrebatarlo para otro. Son el espejo político del otro. En ambos no hay solución posible para un país que lo menos que necesita son radicales en monólogos eternos.