El conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, el frenetismo digital, el aumento de precios a escala global y la falta de previsibilidad son los aspectos que más afectan a los empresarios de todo el mundo, según consignó la 26º Encuesta Anual Global de CEOs de la firma PwC. Es por ello que un 73% de los encuestados consideró que la economía internacional crecerá menos en el 2023. La consultora, que prevé invertir U$S 45 millones desde el 2021 hasta el 2024 en Argentina, ya había informado sobre el efecto de las nuevas regulaciones de criptomonedas en el comercio mundial.
CEOs argentinos coinciden con pesimismo global
En Argentina, la cantidad de encuestados que percibe negativa la situación económica internacional es del 51%, por debajo del sondeo global, pero el pesimismo incrementa al analizar la evolución a corto plazo de la situación nacional: el 63% cree que empeorará. Es el porcentaje más alto de negatividad en la región, aún más cuando se lo compara con la opinión de los CEOs de Brasil (27% ve un horizonte negativo) y Uruguay (21%). Por otro lado, entre los empresarios nacionales un 43% manifestó expectativas positivas para los próximos tres años.
La principal preocupación para 7 de cada 10 encuestados fue la inflación. La mayoría considera que su organización padecerá alta o extrema exposición al incremento sistemático de su estructura de costos en los próximos meses, mientras que un 56% señaló que este riesgo continuará durante los próximos 5 años.
Además, la mitad de los ejecutivos locales expresó preocupación por la volatilidad macroeconómica, tanto a corto como largo plazo. En coincidencia con sus pares internacionales, la amenaza por riesgos informáticos se configura como una preocupación a corto plazo (16%) y en el siguiente lustro (32%) para los CEOs nacionales.
En este sentido, el 35% de los encuestados argentinos aseguró que sus compañías no serán económicamente viables en diez años, proporción que coincide con las respuestas regionales y que a nivel global asciende al 39%. Es por eso que el 65% de los consultados en el país tienen planeado invertir en capacitación laboral, para que sus recursos humanos estén formados ante los desafíos que implica el avance tecnológico.
Un aspecto en el que los empresarios nacionales concuerdan con los ejecutivos internacionales es en la preocupación por el impacto a corto plazo de los riesgos climáticos. El 12% avanza con programas para mitigar los riesgos climáticos, generar oportunidades y descarbonizar, como desafíos de primer orden. Sin embargo, los CEOs argentinos están más comprometidos con llevar adelante acciones para cumplir objetivos ambientales, ya que el 44% de los consultados ya ha emprendido o completado el proceso de adecuación de nuevas regulaciones con perspectiva ecológica, porcentaje más alto que el estipulado por los ejecutivos de otros países (21%).
“Vemos en los CEOs argentinos una vocación especial por enfrentar los desafíos protegiendo las fuentes de empleo generadas», consideró Santiago Mignone, socio a cargo de PwC Argentina. “El gran desafío que tendremos los CEOs argentinos en esta etapa será encontrar un equilibrio en las acciones que permita, por un lado, resolver las necesidades inmediatas de las empresas atravesadas por una coyuntura local por demás exigente, a la vez que deberemos planificar estratégicamente los negocios de modo de poder incluir las grandes tendencias globales que nos afectan», añadió.