Matan a tiros a dos adolescentes de 14 y 15 años en un presunto ataque sicario

Comparte si te ha gustado

Valentín Solís y Eric Galliz tenían 14 y 15 años. El jueves por la tarde fueron asesinados en el Fonavi de Ruillón y bulevar Segui por personas que pasaron y disparon, mientras ellos estaban sentados en la vereda. El dolor y la impotencia de los familiares y allegados se hizo sentir en la cuadra donde está ubicado el pasillo de viviendas, y en la escuela Lola Mora, a la que asistían los chicos. “Era un nene inocente”, sollozó la mamá de Valentín, quien sintió la necesidad de salir a decir que «no estaba metido en nada». El doble crimen ocurrió horas después de que el miércoles por la noche una joven de 15 años quedara internada en terapia intensiva tras ser baleada junto a otro chico de 14, en la misma zona, mientras jugaban a las cartas. Además, ayer hubo otros dos homicidios –uno en ocasión de robo–. Cuatro muertes violentas en Rosario, en menos de 24 horas.

El jueves, pasadas las 16, Valentín estaba sentado junto a Eric en uno de los pasillos del Fonavi en el que vive su abuela. “No tuvo clases y vino acá, se sentó y le sacaron la vida”, dijo la familia sobre el momento del crimen. “Era bueno, igual que el otro chico. Eran dos inocentes. Valentín no hacía nada más que ir a la escuela, tenía buenas notas, no le gustaba faltar. No tenía nada que ver con ningún ajuste de cuentas ni con drogas. Jugaba a la pelota y le había salido un tumor vascular en la pierna, por lo que estábamos yendo al (Hospital de Niños Víctor J.) Vilela y por eso había tenido que dejar de jugar”, dijo Elizabeth, mamá de Val, como le decía a su hijo.

En la escuela donde concurrían las víctimas había un cartel que rezaba «viernes, cerrado por duelo». Varios docentes hablaron en diferentes medios radiales y pidieron que no se naturalice este tipo de sucesos. Una de las maestras del establecimiento pidió políticas integrales. “La escuela no va a resolver todos los problemas. Estos chicos necesitan otros espacios, artísticos, culturales, deportivos, en donde puedan proyectar y armar su proyecto de vida. No puede ser que los chicos mueran a los 14 y 15 años”, dijo Verónica.

Otro docente, agregó: «Hoy tenemos tres sillas vacías por la violencia», en relación a los dos chicos asesinados y a la adolescente que permanece internada por el hecho de la noche anterior. «No se puede vivir así y no pueden vivir así las comunidades en las que trabajamos. Se respira y se siente en los comentarios que nos hacen: la violencia es constante y hay una normalización de situaciones anómalas y que las autoridades no ven, no entienden y no escuchan”, dijo Andrés en Lt8. Además, lamentó que «hay una militarización del territorio. Los chicos que van a estudiar son revisados, como si no se pudiera transitar. Les revisan la mochila y los problemas de violencia no dejan de crecer. No lo podemos naturalizar”.

El fiscal Adrián Spelta, que investiga el doble crimen, dijo que «dos de los tres autores están individualizados. Anoche (por el jueves) se tomaron medidas, se hicieron allanamientos y se obtuvo resultados positivos en cuanto a la identidad de uno de los autores, un menor de 18 años, por lo que se dio intervención al Juzgado de Menores», dijo. «En cuanto a una persona mayor, está identificada y estamos en procura de dar con esta persona».

Consultado sobre el móvil del hecho, el fiscal indicó que «es reciente» y que lo que se sabe es que «se acercaron tres personas (aparentemente caminando) y dispararon con un arma de grueso calibre y de rápida repetición, puede ser una ametralladora o una pistola adaptada. En principio, dirigieron el ataque a los dos chicos que murieron. Las 16 vainas encontradas en el lugar se corresponden a una misma arma».

Si bien el fiscal se limitó a dar datos para «preservar la investigación», dijo que no se descarta la posible relación del hecho con el ocurrido la noche anterior aunque aclaró que no está confirmado, sino que se investiga.

A modo de reflexión, señaló: «Estamos hablando de dos criaturas que lamentablemente fueron víctimas de un ataque armado. Es un hecho muy triste por la edad que tenían, y va más allá de un análisis de la Fiscalía, sino que debería ser un análisis de política social más que de persecución penal», dijo el fiscal.