Lula llega por tercera vez a la presidencia de Brasil

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Un ajustado triunfo está logrando Lula sobre Jair Bolsonaro en el ballotage.
Lula se impone por un punto y medio de diferencia, cuando se ha escrutado 95% de los votos.
La tendencia le adjudica la victoria.
Muchos lo enterraron políticamente cuando fue encarcelado por corrupción, pero Lula, ícono inoxidable de la izquierda de Brasil, logró un tercer mandato con la promesa de volver a aquellos días de progreso cuando posibilitó que millones de personas salieran de la pobreza.

Luiz Inácio Lula da Silva, autodefinido “joven de 76 años”, resucitó cual ‘ave fénix’ en la política tras la anulación de su condena por la corte suprema, y este domingo encaró su sexta elección presidencial, frente al mandatario saliente, el ultraderechista Jair Bolsonaro.

“Quiero probar que un metalúrgico (…) va a arreglar este país, y el pueblo va a volver a comer tres veces por día”, prometió por estos días el exsindicalista salido de la pobreza en un mitin en Sao Paulo. “Haremos lo que ya hicimos”.

Dos veces presidente entre 2003 y 2010, Lula dejó el poder con una popularidad de casi 90% tras una gestión en la que 30 millones de los más de 200 millones de brasileños salieron de la pobreza.

Y se granjeó un enorme prestigio internacional como piloto del “milagro” económico brasileño, empujado por los altos precios de las materias primas.

Aunque de ganar, no podrá contar con la misma bonanza: si bien la economía da señales de mejoría, con crecimiento, menos inflación y más empleo, está lejos de la prosperidad de los años 2000.

Foto Julin lvarez

Foto: Julián Álvarez.

Las mesas cerraron a las 17 (la misma hora en Argentina), después de estar abiertas desde las 8, y a continuación comenzará la divulgación en tiempo real de los resultados gracias al sistema de urnas electrónicas.

Lula votó cerca de San Pablo y dijo que en la elección estaba en juego «un modelo de país y de vida, mientras que el ultraderechista Bolsonaro sufragó en Río de Janeiro y se mostró confiado en vencer «si Dios quiere» y «por el bien de Brasil».

La Policía Caminera se vio envuelta en un escándalo al instalar más de 540 operativos en rutas, especialmente en el noreste del país, con el que bloquearon el paso de muchos electores del Partido de los Trabajadores (PT) de Lula.

El escándalo con la policía que marcó la jornada electoral

La presidenta del PT, Gleisi Hoffmann, pidió la detención del jefe de la institución, Silvinei Vasques, que había publicado en Instagram un mensaje en apoyo a la reelección de Bolsonaro.

El funcionario fue convocado de urgencia al Tribunal Superior Electoral, cuyo titular, Alexandre de Moraes, ordenó el cese de las operaciones entre las 15.30 y las 17, es decir, hasta el fin de la votación.

Moraes, considerado parcial por el presidente Bolsonaro desde 2021 cuando comenzó a denunciar la falta de transparencia de las urnas electrónicas, sostuvo que el informe del jefe policial indica que las operaciones fueron por cuestiones de «tránsito» y que se investigará una por una las acciones.

Foto Julin lvarez

Foto: Julián Álvarez.

«Fue determinado que todas las operaciones cesarán inclusive para que los electores no lleguen tarde al plazo de votación», aseguró tras reunirse con la jefatura policial, aunque aclaró que los vehículos no volvieron al lugar de origen, sino que los votantes han sufrido apenas un «atraso».

Políticos del PT de Bahía denunciaron que diputados y senadores fueron parados porque llevaban adhesivos con la cara de Lula.

150 millones de electores

Unos 150 millones de brasileños estaban habilitados para votar hoy. Más del 20% del electorado se abstuvo de hacerlo en la primera vuelta y gran parte del esfuerzo final de ambos candidatos estuvo destinado a potenciar la concurrencia a las urnas.

El presidente, de 67 años y en el poder desde 2019, se presenta como el paladín de los valores familiares tradicionales, opuesto al aborto y al matrimonio igualitario y a la educación sexual integral.

Tenemos «expectativas de victoria para el bien de Brasil. Solo hemos tenido buenas noticias en los últimos días. Si Dios quiere seremos victoriosos hoy a la tarde», dijo Bolsonaro luego de votar en una escuela del oeste de Río de Janeiro.

Foto Julin lvarez

Foto: Julián Álvarez.

El mandatario de ultraderecha llegó a la escuela en el barrio Villa Militar, en el oeste de Río de Janeiro, minutos antes de la apertura de las mesas, escoltado por una caravana de autos negros y vestido con la camiseta del seleccionado de fútbol de Brasil.

Desde allí se fue al Aeropuerto Internacional de Galeao para recibir al equipo de fútbol del club Flamengo, que ayer ganó la Copa Libertadores de América en Ecuador. El presidente alzó la copa y se sacó fotos con los jugadores.

El expresidente Lula, de 77 años, votó una hora y media más tarde en una escuela del cordón industrial de San Pablo.

«Esta elección no define solo un modelo de país, sino que define un modelo de vida para los brasileños«, sostuvo, vestido con una guayabera blanca, luego de salir de la misma escuela donde se votó a sí mismo por primera vez para presidente en 1989.

«Por eso, es la elección más importante de mi vida, por un proyecto para que la democracia sea vencedora», agregó.

El veterano líder de izquierda abogó por relanzar el proceso de integración sudamericana y latinoamericana, reforzando el Mercosur y recomponiendo a la Unasur para poder negociar con las grandes potencias en pie de mayor igualdad.

Se eligen 12 gobernadores

En esta elección de alta tensión también se elegirán en balotaje 12 gobernadores en estados de los cuales los más importantes son San Pablo, Río Grande do Sul y Pernambuco.

La alianza de partidos que apoya a Bolsonaro obtuvo una amplia mayoría en el Congreso en la primera vuelta del 2 de octubre, lo que facilitaría un eventual nuevo mandato del presidente y dificultaría un Gobierno de Lula en caso de resultar vencedor.

Foto Leo Vaca

Foto: Leo Vaca.

Horas antes del balotaje, dos sondeos difundidos anoche mostraron adelante a Lula: uno por 52% a 48%, de la consultora Datafolha, y otro por 54% a 46%, de la consultora Ipec.

La primera vuelta de los comicios

En la primera vuelta, Lula se impuso por 48,4% a 43,3%, pero Bolsonaro tuvo un desempeño mucho mejor que el que habían predicho las encuestas.

El expresidente promete «arreglar el país», impactado todavía por la crisis de la pandemia de coronavirus y sus 688.000 muertos, que ha achacado a una pésima gestión de la crisis sanitaria por parte de Bolsonaro.

Lula ha hecho hincapié en los logros socioeconómicos en sus dos mandatos, entre 2003 y 2010, cuando 30 millones de brasileños salieron de la pobreza con iniciativas sociales financiadas con un ‘boom’ de las materias primas que exporta Brasil.

Foto Leo Vaca

Foto: Leo Vaca.

El exmandatario cuenta con el apoyo de los más vulnerables y de quienes se resintieron de las políticas y exabruptos del ultraderechista Bolsonaro, como los jóvenes, las mujeres y las minorías.

El presidente, por el contrario, cuenta con el apoyo del electorado blanco, de las personas con mayores ingresos, de los sectores vinculados al agronegocio y, sobre todo, de los evangelistas.

Ambos candidatos han prometido mantener políticas de ayuda social que Bolsonaro redobló en los últimos meses de cara a los comicios.