Los jujeños celebraron este martes el 210 aniversario del Éxodo Jujeño, que recuerda la retirada estratégica hacia Tucumán que en 1812 emprendió el pueblo al mando del general Manuel Belgrano ante el avance del ejército realista y que tuvo una importancia significativa en la lucha por la independencia nacional.
La conmemoración fue encabezada por el gobernador local, Gerardo Morales, frente al monumento el General Manuel Belgrano en la plaza homónima y participaron otros mandatarios provinciales que llegaron a la ciudad de San Salvador de Jujuy para la 12da. Asamblea del Norte Grande.
En el acto estuvieron presentes los gobernadores de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; de Salta, Gustavo Sáenz; de Formosa, Gildo Insfrán; de Misiones, Oscar Herrera Ahuad; de Corrientes, Gustavo Valdés y de Catamarca, Raúl Jalil, además de la vicegobernadora de La Rioja, Florencia López.
Morales valoró «la impronta del gauchaje en todo el interior del país»
Durante su discurso, el gobernador de Jujuy afirmó que «el 23 de agosto es uno de los tantos hitos de nuestra provincia, una epopeya que empieza con la presencia del Ejército del Norte en estas tierras y con una participación fundamental de las provincias del Interior en la lucha por la gesta emancipadora».
Morales recordó que, ante la avanzada de las tropas realistas, Belgrano tomó la decisión de retirar al pueblo y dejar tierra arrasada al ejército enemigo, que fue clave para triunfar luego en las batallas de Tucumán, en septiembre de 1812, y de Salta, en febrero en 1813.
Morales valoró «la impronta del gauchaje en todo el interior del país, particularmente de este Norte Grande para lograr un hito fundamental que fue el Éxodo jujeño» y sostuvo que la gesta «no solo tuvo que ver con las fuerzas armadas sino con el sacrificio de un pueblo».
Morales destacó la importancia del denominado Norte Grande y expresó su deseo de que «podamos lograr la reparación histórica para nuestros pueblos».
Por su parte, el intendente de San Salvador de Jujuy, Raúl Jorge, consideró que el 23 de agosto «es la fecha más heroica y reflexiva para los jujeños» donde «nos convocamos para celebrar una estrategia de uno de los prohombres más grandes que vio nuestra historia y celebramos ser una ciudad y una provincia profundamente belgraniana».
Tras los discursos oficiales, las actividades alusivas al Éxodo jujeño continuaron con el tradicional desfile cívico militar y gaucho en avenida Forestal, en el barrio Alto Comedero.
Una marcha por las calles de San Salvador de Jujuy
Las celebraciones comenzaron la noche del lunes con una marcha evocativa por las calles de San Salvador de Jujuy para recrear aquel momento de 1812 en que los jujeños decidieron abandonarlo y destruirlo todo para dejar sólo tierra arrasada.
Miles de jujeños, vestidos con ropajes de época, a caballo, caminando o en carretas avanzaron lentamente con sus equipajes, vacas, llamas y gallinas buscando renovar el sentir patriótico de sus antepasados.
La marcha concluyó en el mítico Río Xibi Xibi, que atraviesa la ciudad, donde se quemaron casitas que simbolizaban ese momento duro y difícil de los jujeños, con la intención de dejar sin abastecimiento a las tropas españolas.
