El 25 de julio concluye el receso invernal en Salta, y el Ministerio de Educación provincial continúa avanzando en los posibles acuerdos para que las escuelas primarias rurales, con jornada simple, regresen a clases con la extensión de una hora más de clases. De ser así, se calcula que serían 170 escuelas rurales, de las 299 existentes, las que adherirán a la medida propuesta por el Ministerio de Educación de la Nación.
Si bien el cierre de cualquier tipo de acuerdo se dará a través de la firma de un convenio entre Provincia y Nación; el ministro de Educación de Salta, Matías Cánepa, y su par de Economía, Roberto Dib Ashur, adelantaron a los docentes -en el marco del diálogo en paritarias- dos posibles escenarios en lo referido al incremento económico. La primera alternativa es una suba porcentual del 25% al básico. Mientras que la segunda, prevé que el aumento sea enmarcado dentro del código 22 de la escala salarial docente, es decir, el ítem de jornadas completas o extendidas.
Uno de los sectores presentes en las mesas de diálogo con funcionarios, Docentes Autoconvocados de la Plaza, dió a conocer en un parte de prensa que «según la estrategia del gobierno», se abonaría el aumento bajo el código 22, ya que está previsto que a largo plazo se avance en una transformación efectiva de jornadas simples a jornadas completas.
El docente Ricardo Yugra, delegado autoconvocado por el departamento Iruya, contó a Salta/12 que hubo cierto desacuerdo cuando se habló de la aplicación del código 22, ya que «haciendo el cálculo, decían que no representaba un (aumento del) 25%, sino que sólo llegaba a un 11%». «El ministro dijo que se iba a solucionar y que lo más factible era (aplicar una hora más), a través de ese código» porque se garantizaría que estas escuelas luego se conviertan en jornadas completas, relató.
Yugra aseguró que «cada escuela va a decidir si ingresa a este incremento de hora o no», y de acuerdo a lo informado durante el encuentro, serían casi 170 los establecimientos primarios rurales que aceptarían la propuesta en este primer momento. Hace un mes el Ministerio de Educación de Salta envió un formulario a cada uno de los directivos para conocer su posición al respecto. Allí estaban asentados los horarios convenientes para llevar adelante la iniciativa, además de los impedimentos que veían al respecto, ya sea en infraestructura o vinculado al posicionamiento de las familias de la comunidad.
Docentes participantes de la reunión con los ministros recordaron que hay problemas edilicios. Cánepa les pidió que se le dijera en detalle en qué consistían y en cuáles establecimientos, quedando la docencia un transmitir un listado. Además, la mayoría de las autoridades educativas coincidió en que la hora extra debía añadirse al final de la jornada, es decir que el horario sería de 8 a 13.
«Casi todas las escuelas rurales viven una situación compleja con el clima y suele hacer más frío en esos lugares, así que no era conveniente empezar la jornada antes» ya que «Ingresar media hora antes, implicaba más frío», indicó Yugra.
El delegado por Iruya también manifestó que se le pidió a Cánepa que la Secretaría de Planeamiento Educativo remita un «marco normativo» para que «las escuelas tengan acciones claras para trabajar en ese tiempo escolar con fortalecimiento en el aprendizaje de lengua y matemática». Aseguró que si no se responde ese pedido, el contenido dictado en esa hora extra sería «muy al azar y sin definiciones claras sobre qué contenidos dictar».
Desde el Ministerio de Educación de Salta se reiteró a Salta/12 que dado que la iniciativa es de la Nacion, la mayoría de las condiciones de implementación quedarán más claras en la firma del convenio. A principios de junio, la secretaria de Gestión Educativa de la provincia, Adriana Saravia, dijo a este medio que aún faltaban cerrar acuerdos bilaterales, pero esperaban «empezar después de las vacaciones de julio».
La funcionaria recordó que al ser una propuesta de Nación, es preciso tener en el claro el compromiso de ambas partes. Sobre todo teniendo en cuenta que el presupuesto de este año no tenía contemplado una hora extra en escuelas de jornadas simples. «Ninguna provincia tenía presupuestado el tema de que sean más horas de trabajo», que implica un aumento en las remuneraciones, manifestó Saravia, agregando que «todo eso está en estudio».
Por su parte, el Ministerio de Educación de la Nación ya firmó acuerdos con Tucumán, Santa Cruz, el Chaco y Catamarca. Según definió el titular de esa cartera, Jaime Perczyk, el objetivo es “resolver la pérdida que hemos tenido en la pandemia” y reparar el “deterioro que había habido en los cuatros años anteriores de desfinanciamiento».