«El chineo es abuso sexual infantil«, «Las niñas indígenas tienen derecho a vivir libres de violencia», son los lemas de la campaña #BastaDeChineo que lanzó esta semana el gobierno de Salta, junto con la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (Senaf), y el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), para concientizar sobre esta violencia sexual y racista, ya que se ejerce sobre niñas y adolescentes de los pueblos originarios.
Lo que se conoce como «chineo» son ataques planificados y llevados a cabo por varones en grupo contra mujeres de los pueblos originarios, mayormente en las provincias del norte del país y en varios puntos de América Latina.
«Es un ataque sexual a niñas, de abuso, por parte de grupos de varones adultos, que pone en evidencia concepciones que tenemos que desterrar, la concepción colonialista del criollo sobre las personas de pueblos originarios, la condición patriarcal, las mujeres como objeto, y el desconocimiento de que las niñas tienen derecho a una protección especial», dijo Gabriel Lerner, titular de la Senaf.
A partir del diálogo del organismo con entidades que trabajan en territorios originarios, «entendimos la necesidad de armar una campaña colectiva y articulada para abordar esta problemática desde las diversas dimensiones».
El lanzamiento de la campaña se llevó a cabo en la localidad salteña de Santa Victoria Este, en el marco de la inauguración del Espacio Cultural «Otamsek wet is», junto a la Orden Franciscana de San Ramón para la Nueva Orán, que trabaja con la Senaf.
Con la campaña «ponemos en discusión un tema del cual no se habla, que está naturalizado en comunidades en las que nuestras niñas y adolescentes no son vistas como sujetas de derecho sino como cosas», expresó Carina Iradi, secretaria de Primera Infancia, Niñez y Familia de Salta. «Se va empezando a hablar de esta cuestión y eso ya es un paso muy importante», subrayó.
En mayo, el Tercer Parlamento Plurinacional de Mujeres y Diversidades Indígenas por el Buen Vivir, realizado en Salta, había pedido que se tipifique el chineo como un crimen de odio, además de considerarlo una violencia sexual hacia mujeres y niñas de los pueblos originarios.
Unas 250 mujeres de más de 20 naciones indígenas se reunieron en la localidad de Chicoana donde se impulsó la campaña #AboliciónDelChineoYa para que el Estado argentino pusiera fin a este delito. Y se visibilizara esta “práctica criminal, racista, colonial y sistémica” que debe ser considerada como un “crimen imprescriptible”.