El Ministerio Público Fiscal (MPF), a través de la Unidad Fiscal de Delitos Flagrantes IV, dirigida por Carlos Picón, llevó adelante una audiencia para el tratamiento de un acuerdo de suspensión de juicio a prueba (probation) para un hombre, de 43 años, que fuera imputado por el delito de portación ilegal de arma de fuego de uso civil en perjuicio de la seguridad pública. Durante la jornada de ayer martes, el auxiliar de fiscal, Ricardo Ybañez, relató el hecho que tuvo lugar el pasado lunes 6 de junio, a las 10:30 horas, en la zona conocida como El Cruce de la ruta 336 con la ex ruta 34, en la localidad de Garmendia (departamento Burruyacú), mientras se realizaba un control vehicular en el marco del Operativo Lapacho. «Estamos ante una situación de flagrancia donde el sujeto fue sorprendido cometiendo un hecho ilícito y dentro del término de las 48 horas”, subrayó Ybañez. Entre los elementos probatorios, el representante del MPF hizo mención al secuestro del pistolón calibre 14 marca Rexio de un solo caño el cual tenía en su recámara un cartucho (de impacto real). El acuerdo establece que el imputado deberá realizar tareas comunitarias, por el plazo de un año (una vez a la semana durante tres horas), y el pago de $25.000 (por única vez) que el Equipo de Coordinación de Políticas Reparatorias del MPF destinará a una institución de bien público. Asimismo, se dispuso el decomiso del arma. Finalmente, la jueza actuante validó el instituto peticionado.
El hecho
El lunes 6 de junio de este año, a las 10:30 horas, en el lugar conocido como El Cruce de la ruta 336 con ex ruta 34, en la localidad de Garmendia (departamento Burruyacú) y mientras estaba apostado el personal de la Digedrop Este, en cumplimiento de una disposición de seguridad preventiva en el marco del operativo Lapacho, se acercó a la zona un conductor (quien se desempeña como empleado en una empresa de agricultura) a bordo de una camioneta 4×4 (marca Toyota Hilux) donde se le requirió la documentación pertinente del rodado. En esa oportunidad, los efectivos pudieron observar que el hombre, de 43 años, llevaba un arma de fuego que se encontraba entre los dos asientos delanteros, más precisamente a la altura del freno de manos. Conforme a ello, se procedió al secuestro del pistolón calibre 14 ya que el sujeto indicó que no contaba con la reglamentación correspondiente para su portación, transporte o tenencia legítima como usuario. Posteriormente, se dispuso su aprehensión.